Una vez más estoy aquí, solo en la oscuridad de mi habitación, conviviendo con mis demonios y navegando entre mis temores.
Vislumbro la penumbra, sigiloso, al tanto de los suaves sonidos del exterior. Busco lúdicamente señales de vida, suspiros, voces. Juego inocentemente, me divierto cazando fantasmas. Buscando almas perdidas detrás de mi ventana, bajo el tétrico velo de la luna.
Lamentablemente sé, muy en lo profundo, que aquellos espectros de la noche no se encuentran allá afuera. Están aquí, conmigo. Dentro de mí. Soy yo.
Son mi pasado, mi presente. Cada pensamiento, cada sentimiento. Cada idea y cada anhelo. Cada uno de mis miedos, mis ambiciones y deseos. Cada uno tiene vida propia. Cada uno es libre y se desliza en mi existencia, de aquí para allá. Yo los puse ahí, y ahora ahí están.
Aquí están…
… y aquí seguirán, porque soy Yo.
Te perdono que estés en plan de cacería de fantasmas,pero prométeme algo… al susodicho panteón no volvemos… jaja