Y al final del sombrío y polvoriento pasadizo hallaron un majestuoso mausoleo; y tras sus puertas, un sublime arcón; y bajo su cubierta, una preciosa vasija; y en su interior… los funestos restos de un marchito corazón.
Y al final del sombrío y polvoriento pasadizo hallaron un majestuoso mausoleo; y tras sus puertas, un sublime arcón; y bajo su cubierta, una preciosa vasija; y en su interior… los funestos restos de un marchito corazón.